miércoles, 4 de febrero de 2009

El magnífico Tolkien...


Después de haberme chutado El hobbit, La trilogía del Señor de los Anillos (no las pelis, ok?), tratar de entender el complicado Silmarillion y comenzar a leer Los Hijos de Húrin, más o menos tengo una noción de lo que sucedía en la cabecita de ese genio literario como lo fue John Ronald Reuel Tolkien (cabrón, no?). El Sr. de los Anillos y las plumas nos ha transportado a un universo de cuentos, leyendas e historias que en lo particular me ha dejado con baños de asiento, convirtiéndose en uno de mis escritores favoritos (junto a Verne, Asimov, Kafka, Hesse, García Márquez, Sabines y Poe).

Para dejar la palabrería a un lado, este es un pequeño símbolo de mi admiración hacia este personaje que ha pasado a formar parte de esa cultura de geeks que luego nos encontramos en Arda... Dibujados por un hermano del alma, Ahimo, e ilustrado por su servilleta...

Por qué pocas palabras? Ya me di cuenta que algunas se las lleva en viento, otras entran por un oído y salen por el otro y las más, son las que ni siquiera son tomadas en cuenta, so...

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